Mamá es la mejor persona del mundo

Cuando éramos pequeños, nuestra mamá era nuestro refugio. Nos enseñaron a vestirnos, a comer sin hacer tanto desorden, a cuidarnos y, lo más importante, nos enseñaron qué es el amor. Día a día realizan un montón de actividades y aun así, tienen tiempo para compartir momentos especiales con nosotros.

Educarnos y formarnos sin duda no fue fácil para ellas. A lo largo de nuestro desarrollo atravesamos por etapas muy peculiares y complicadas donde descubrimos cosas nuevas y, algunas veces, tomamos decisiones que contrarían a las de nuestros padres. Por esta razón, contar con un pilar como las mamás, nos ayuda a detenernos, analizar y comprender mejor las situaciones. Y sí, creemos que las mamás tienen un sexto sentido para percibir el peligro y las cosas que nos harán daño.

Nuestras mamás siempre tienen los mejores consejos y abrazos. Cada una de sus muestras de cariño nos reinician y nos ayudan a sentirnos bien de nuevo. Ellas son la definición perfecta de un guerrero; nos protegen y nos cuidan por sobre todas las cosas.

Las mamás representan fuerza, amor, pureza, honestidad, compromiso y muchas cosas más. Ellas se ponen en segundo plano, dejan sus necesidades y deseos de lado para vernos felices y realizados como personas. Para las madres no existe nada más importante en su vida que sus hijos; darían la vida por cada uno de ellos sin importar la edad que tengan o lo difícil que hayan sido. Siempre serán sus bebés.

Ser mamá en estos tiempos implica el triple de trabajo que un empleo de oficina. No solo están encargadas de nuestra alimentación y cuidado. Se encargan de fomentar valores, principios, objetivos de vida, sueños e ilusiones. Desean que nos convirtamos en personas con profesión que contribuyan a que este mundo sea mejor. Somos su creación, somos su legado, somos su pasión.

De todo corazón queremos agradecerles a todas las mamás su grandiosa labor y extraordinaria misión. Son únicas, especiales, auténticas y simplemente maravillosas. Las queremos y admiramos con todo nuestro ser.

Tú que estás leyendo este artículo, cuéntanos, ¿qué hace especial a tu mamá?